miércoles, 19 de septiembre de 2012

Mucho mejor


Mari Tere cumplía a raja tabla todos los mandamientos de su pueblo, que se transmitían de generación en generación, de madres a hijas:

Primero: Te casarás antes de los 30. Si es antes, mucho mejor.
Segundo: Tendrás un hijo a los 30. Si es antes, mucho mejor.

Tercero: Te casarás en la Parroquia de Santa Catalina. Cuantas más flores mejor.
Cuarto: Celebrarás tu enlace en Casa Paco (a tu servicio desde 1950). Cuantos más invitados mejor.

Quinto: Te comprarás tu traje de novia en Conchi Trajes de Novia y Madrina.

Pero Mari Tere, quería un traje mucho mejor, una boda mucho mejor, y por ello, a pocas semanas vista, decidió saltarse el cuarto y quinto mandamiento, celebrar su unión en el prado donde entregó su virginidad a su futuro esposo y comprar el traje en otro lugar.
La abuela casi hubiera preferido que su nieta fuese embarazada a la boda antes que saltarse el cuarto y el quinto mandamiento.

Todo listo, que empiece la celebración. Antes del segundo plato, la mala conexión de uno de los fogones provocó la intoxicación por inhalación de gas, primero de uno de los cocineros, después del otro , seguidamente, uno tras otro,  todos los camareros y por último los comensales de la mesa anexa a la caseta convertida en improvisada cocina, que no eran otros que la novia, el novio, los respectivos suegros y la abuela.


El ir y venir de ambulancias a urgencias y los 13 ingresos en observación pusieron punto y final a la boda. Mari Tere y su flamante esposo compartieron su noche de bodas con sus suegros, camareros y cocineros y por supuesto la abuela, que repetía una y otra vez: “castigo de Dios”.

Los gemidos y sollozos de Mari Tere, solo interrumpidos por los vómitos, ni por asomo se correspondían a la consumación del acto. No solo hubiese querido un traje mucho mejor, una boda mucho mejor, en definitiva, lloraba porque también quería un novio mucho mejor.
Coño Mari Tere no llores tanto, lo has conseguido, es la boda más original que he visto y encima te has ahorrado la barra libre, repetía más borracho que intoxicado el suegro de Mari Tere.

Moraleja: si te casas en este pueblo cumple los cinco mandamientos, es mucho mejor.

2 comentarios:

  1. Pero esto es real o inventado...jajaaaja...muy bueno...y el suegro muy perspicaz! Saludos "yo enfermero"

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  2. Noelia real real abuela incluida. Saludos.

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